Trasversales
Houzan Mahmoud

Por las libertades en Irak

Revista Trasversales número 4,  otoño 2006

Traducción realizada a partir del material publicado por Peace Work Magazine
Con licencia Creative Commons

Bill Weinberg, editor del periódico on-line World War 4 Report entrevistó a Houzan Mahmoud el 21/3/2006 en WBAI radio y Sara Burke, editora de Peacework, se comunicó con ella vía correo electrónico en mayo. Aquí se incluyen partes de ambas conversaciones.
Blog de Houzan Mahmoud
http://houzanmahmoud.blogspot.com




Houzan Mahmoud es responsable en el exterior del Congreso de las Libertades de Irak y una de las principales figuras de la Organización por la Libertad de las Mujeres en Irak
La organización de las mujeres ha sido un factor clave para el desarrollo de la resistencia laica en Irak, pues las mujeres saben que ellas son las personas más vulnerables a la persecución y a la represión en una nación militarizada e islamista.


BW: Mucha gente teme solicitar la retirada inmediata de las tropas estadounidenses. Temen que Irak se hunda en el abismo. ¿Qué opinas de ello?
HM: La sociedad iraquí ya está siendo destrozada por la propia ocupación, por el caos creado, por la falta de seguridad y estabilidad para el pueblo, por la imposición de un régimen títere sobre la población, profundamente dividida por líneas sectarias que, en muchos casos, son criminales y tendrían que ser llevadas ante la justicia, pero que, por el contrario, nos están siendo impuestas. Ahí están todas esas milicias armadas, que han traído una guerra civil, una guerra civil sectaria, una guerra religiosa. Las fuerzas de ocupación llevan tres años en Irak. Cada día vemos que la situación va a peor. Creo que no ha habido una sola semana de cualquier mes en que no hayamos visto centenares de personas asesinadas por “bombas suicidas” y ataques terroristas. Están utilizando la ocupación como pretexto para justificar estos actos criminales. La ocupación no soluciona nada de esto, realmente. Precisamente profundiza los problemas y la división entre la gente. Por lo tanto, pienso que la retirada de las tropas hará más fácil resolver muchos de estos problemas. La mayoría del pueblo iraquí quiere ver irse de Irak a todos los soldados.
Entonces, ¿qué otra excusa encontrarán esas milicias armadas para aterrorizar, matar o secuestrar? ¿Qué otras excusas tienen? Su excusa es la ocupación. Por lo tanto, creo que es incorrecto creer que quitársela de encima creará más problemas. No, en mi opinión no será peor que esto.

BW: ¿Piensas que una retirada estadounidense realmente abrirá más espacio para algún tipo de alternativa civil laica?
HM: Entonces, al menos, la cosa estará entre nosotros y ellos.

BW: ¿Y quiénes son esos “ellos”?
HM: Milicias armadas e islamistas, redes terroristas, que básicamente no tienen más excusa que la ocupación para justificar sus actos criminales.

BW: Dices que entonces será entre vosotros y ellos. ¿Es eso necesariamente una buena cosa? ¿Sin ninguna fuerza mediadora?
HM: En mi opinión, Estados Unidos y las potencias están protegiendo redes terroristas, no a los movimientos laicos y progresistas en Irak. Las fuerzas ocupantes fueron las primeras en evitar que la Organización de la Libertad de las Mujeres en Irak realizase una  concentración contra las violaciones y los secuestros. Nos dijeron que no se nos permitía  hacerla sin su permiso. El primer Sindicato de Parados en Irak organizó manifestaciones pacíficas en Bagdad nada más comenzar la ocupación, y los poderes ocupantes estadounidenses arrestaron a sus líderes. No quieren ver ningún movimiento progresivo, militante, laico e igualitario en Irak, con una perspectiva para un futuro mejor, para una alternativa, para un gobierno que no sea una marioneta de Estados Unidos. Quieren imponer marionetas, no les preocupa lo que le ocurre a la sociedad... sólo se preocupan de sus propios intereses. No protegemos sus intereses, sino los de la población iraquí; por eso no quieren que crezcamos y no nos prestarán ninguna ayuda.

BW: El segundo argumento que escucho con frecuencia es que tenemos que apoyar a los insurrectos porque son la resistencia realmente existente al imperialismo estadounidense. Que apoyar un movimiento civil o laico es una distracción, y que no tenemos ningún derecho a decir al pueblo iraquí qué forma debe tomar su resistencia.
HM: En reuniones y seminarios realizados fuera de Irak me han dicho “¿por qué no te alías con la denominada resistencia, luchando juntos contra la ocupación?”. Esta pregunta es muy ingenua o realmente estúpida, precisamente por pensar eso. Son islamistas que están asesinando y decapitando a mujeres  por no usar velo. ¿Cómo puedo yo, en cualquier sentido posible, cómo puede la Organización de la Libertad de las Mujeres en Irak, aliarse con el enemigo de las mujeres en Irak? ¿O con esos islamistas  que no pueden ni ver a una persona laica, que consideran a cualquier persona laica como un infiel que debe ser asesinado? ¿Cómo puedo formar alianzas con ese tipo de gente?
Además, ¿cuál es su programa social? Hace falta un programa social para poder alcanzar un acuerdo. ¿Acaso la ocupación lo es todo? Para luchar contra la ocupación, ¿acaso tengo que sacrificar los derechos de las mujeres, tengo que sacrificar los derechos de los trabajadores, el laicismo y mis derechos como ser humano? No. Seguir esa ruta sería un error histórico y suicida para mi movimiento en Irak, sólo para satisfacer a algunos izquierdistas marginales de EEUU o Europa, que han hecho de la resistencia al imperialismo una idea fantástica y romántica. Estos islamistas no tienen ninguna visión antiimperialista. No tienen nada que ver con la lucha de la clase trabajadora o con cualquier cosa semejante. Sus ideas sobre el funcionamiento social son primitivas. Lo que quieren es la talibanización de Irak. No quiero formar parte de esa destructiva agenda.
Lo mejor que le ha ocurrido nunca a Irak consiste precisamente en estos movimientos que estamos llevando hacia delante. Si somos progresistas, si tenemos un punto de vista igualitario, tenemos que promover algo que esté del lado de los derechos de las mujeres, de los derechos de los trabajadores, que fomente el laicismo. No debemos apoyar a fanáticos, ni a movimientos reaccionarios que son opresores se mire como se mire.

SB: ¿Puedes hablarnos sobre la organización por los derechos de las mujeres en el contexto de la más amplia lucha por un Irak laico?
HM: En Irak, el Gobierno de Estados Unidos impuso y otorgó poderes en el supuesto Parlamento a islamistas que están poniendo en práctica la Sharía, la ley islámica. Hay otros grupos armados islámicos que se denominan “resistencia”, pero que son otra versión del Talibán; han convertido Irak en un campo de batalla y han esclavizado a las mujeres, poniéndolas el velo y amenazándolas para que no acudan a la universidad ni vayan a trabajar. Ésta es la situación que encaramos en el Irak ocupado. En este contexto, una verdadera y activa participación de las mujeres en la vida civil se hace casi imposible. ¡Imagínate cómo organizarse, cuando las mujeres sólo pueden salir a la calle con un pariente masculino armado, a causa de la carencia de seguridad básica, y cuando por todas partes están presentes partidos políticos reaccionarios, derechistas, que no consideran a las mujeres como seres humanos! Se ha arrebatado a las mujeres la confianza necesaria para participar en política. En el Congreso de las Libertades de Irak, comenzamos precisamente por ahí: la presencia de mujeres en nuestro movimiento es una precondición para alcanzar la igualdad y la libertad. Nuestro movimiento se distingue por su perspectiva progresista hacia la liberación y la igualdad de las mujeres. El alto índice de mujeres líderes y activistas en nuestro movimiento es muy llamativo comparado con el resto de grupos.

SB: ¿Cómo conectar los derechos de las mujeres bajo el Gobierno de inclinación islamista en Irak con los movimientos por el cambio en Estados Unidos?
HM: La ocupación de Irak no es un asunto local; tiene que ser vista a escala global. Lo que sucede en Irak nos afectará a todos. Cuando el Gobierno estadounidense lleva al poder a religiosos reaccionarios y viola los derechos de las mujeres, eso afecta no solamente a nuestros derechos en Irak, sino también a los derechos de las mujeres en Estados Unidos. También allí se están estableciendo muchas leyes contra los derechos y las libertades civiles, bajo el pretexto de que “estamos en guerra” y de que “es para proteger a los americanos”.  Con tal pretexto, hay gente en EEUU que, como nosotros en Irak, ha sido sometida a torturas, detenciones y encarcelamientos arbitrarios, y han sido recortados los derechos de las mujeres y de los trabajadores. Parece que no sólo los iraquíes son una “amenaza” a la seguridad de Estados Unidos. Por lo tanto, es vital la solidaridad internacional con los movimientos laicos, progresistas y comprometidos con las mujeres. Nuestro movimiento en Irak es parte de una lucha internacional más amplia contra la guerra, la opresión y la desigualdad. Por lo tanto, hay un camino común para luchar, en el mismo bando, por la liberación de la humanidad.

SB: ¿Cómo se organizan las mujeres, ya sea dentro o fuera del programa del Congreso de las Libertades de Irak?
HM: El Congreso de las Libertades de Irak se está esforzando en la consecución de una sociedad igualitaria, laica y con un sistema estatal en el que todos los seres humanos sean considerados iguales. Así, nuestras mujeres, activas en el propio CLI y en el movimiento de las mujeres, son consideradas las más valerosas en la lucha por el laicismo y la igualdad haciendo frente al islamismo y al caos. A pesar del peligro, están  organizando y movilizando a otras mujeres y a hombres contra la ocupación y el actual sectarismo presente en Irak. Trabajan en todos los ámbitos en la comunidad, en las escuelas y las fábricas, para extender esta voz y promover este movimiento.

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