Trasversales
Fundación Andreu Nin

Homenajes a Wilebaldo Solano

Revista Trasversales número 6,  primavera 2007


 

Los días 28 y 29 de marzo de 2007 han tenido lugar en Madrid dos importantes actos de homenaje a Wilebaldo Solano, de noventa años de edad, que fue secretario general de la Juventud Comunista Ibérica durante la revolución española y dirigente del POUM en el exilio. Estas convocatorias han sido organizadas por la Fundación Andreu Nin, con la colaboración con la Fundación Viento Sur, y han concitado numerosas adhesiones y contado con una notable participación.

UN ACTO EMOCIONANTE EN EL CÍRCULO DE BELLAS ARTES

El día 28 de marzo se celebró un importante acto en el Círculo de Bellas Artes que contó con alrededor de 250 asistentes, los cuales abarrotaron completamente la sala y sus laterales. A lo largo de dos horas llenas de emoción se rindió homenaje a Wilebaldo por toda su trayectoria de lucha.

Previamente a las intervenciones de la mesa se proyectó el documental de la Televisión Catalana (TV3) titulado "Wilebaldo Solano, un home d'esquerra",  que recorre algunos momentos esenciales de su vida militante y describe el sentido histórico del POUM frente a las imposturas del estalinismo al hilo de los acontecimientos históricos más importantes que han vivido Wilebaldo y María Teresa, su compañera desde los años cuarenta.

Juan Manuel Vera, en nombre de la Fundación Andreu Nin, abrió el homenaje con una intervención en la cual señaló que se trataba más de un acto de justicia que de memoria histórica, exponiendo que se trataba de agradecer a Wilebaldo toda una vida de lucha por las libertades y por las ideas del socialismo. Asimismo, destacó que se trataba no sólo de un homenaje a Wilebaldo sino también al POUM y a sus militantes, que fueron un producto de toda una etapa de las luchas sociales de la izquierda española. El POUM es parte importante de una tradición antiestalinista y defensora de un socialismo democrático y revolucionario, una tradición que no es patrimonio particular de nadie, sino que está abierta a toda la izquierda social.

Después, intervino el historiador Pelai Pagés que destacó la trayectoria militante de Solano desde antes de cumplir los veinte años hasta ahora, cuando supera los noventa. En diferentes momentos históricos, y en condiciones muy difíciles, la lucha por la verdad y por los fines de un socialismo auténtico representan una aportación imprescindible. Pelai señaló que Wilebaldo representa la trayectoria de un socialismo, marxista revolucionario, y heterodoxo, que siempre denunció el estalinismo como ajeno al socialismo y al comunismo.

La intervención de Delia Blanco introdujo una emotiva historia familiar, del norte de Palencia. Rememoró a los mineros de UGT y  de la Izquierda Comunista primero, y del POUM después, que  participaron en la revolución de Asturias del 34, que sufrieron su represión, que participaron en la lucha antifascista y padecieron la dictadura franquista. Delia recordó especialmente la historia de las mujeres de esos mineros,  víctimas del capitalismo y del patriarcado. Relató el trabajo en la mina de picadores de los "penitentes", niños que bajaban a la mina con una especie de candil con la misión de localizar el grisú. Delia dijo que su socialismo había nacido de esa experiencia. Acabó su intervención con una relación de mujeres poumistas a las que rindió homenaje.

Jaime Pastor recordó a los jóvenes antifranquistas que en París conocieron a las figuras legendarias de los militantes del POUM, evocando, además de a Wilebaldo, a Juan Andrade, a Enrique Rodríguez y a mujeres como Mica Feldman, María Teresa García Banús, Emma Roca, entre otras. Jaime señaló que si se requiere mucho esfuerzo para morir por la revolución, es  mucho más difícil, como ha hecho Wilebaldo, vivir por la revolución, sin renunciar a sus principios.

A lo largo del acto se leyeron algunos emtivos comunicados recibidos de Cristina Simó (nieta de Andreu Nin), de Vicente Muñiz Campos (hijo de dos militantes del POUM ejecutados por el franquismo en 1941) así como de otros compañeros y amigos.

Tras las anteriores intervenciones, Wilebaldo de pie, a pesar de su edad, emocionado, recordó a un destacado militante de Madrid, Alberto Aranda, como símbolo del POUM de Madrid, y también recordó  los esfuerzos, en plena guerra y ofensiva estalinista, para salvar a los 11.000 poumistas que estaban en el frente. Solamente con la colaboración de militantes honestos y políticos antifascistas, como socialistas de Largo Caballero y los hombres de la CNT que ayudaron a esconder a los poumistas, se pudo conseguir que salvan la vida y pudieran continuar la lucha contra el fascismo.

Después de esta intervención improvisada, Wilebaldo leyó un discurso sobre la trayectoria del POUM llegando hasta la creación de la Fundación Andreu Nin.
Al finalizar su intervención, un largo e interminable aplauso de los asistentes puestos en pie rindió a Wilebaldo el homenaje de la sala.

Esa misma noche, durante una cena a la que asistieron varias docenas de amigos de la Fundación Andreu Nin, se entregaron a Wilebaldo y a  María Teresa sendas placas que dejan constancia del agradecimiento por su lucha en defensa del POUM y de las ideas del socialismo.

HOMENAJE EN EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS AL ÚLTIMO SECRETARIO GENERAL DEL POUM

El PSOE, Esquerra Republicana e Izquierda Unida rindieron el día 29 de marzo un homenaje en el Congreso de los diputados a Wilebaldo Solano.

La secretaria general adjunta del Grupo Socialista en el Congreso y diputada del PSC, Teresa Cunillera, recordó que los socialistas catalanes tienen "raíces muy claramente entroncadas" con el POUM, rememoró sus inicios políticos con uno de sus dirigentes, Josep Pané, y agradeció su labor a Solano y al resto de miembros de partido presentes en el acto. "Ni sois nuestro pasado ni sois nuestra historia, sois nuestro presente", sentenció. Tras destacar la trascendencia política del homenaje a Solano, Cunillera lamentó que la izquierda no siempre haya "tenido claro" que es "más fuerte" si actúa unida y que haya sido capaz de "autodestruirse de la manera más inmisericorde" con divisiones internas.

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, destacó que en su formación le gustaría que estuvieran vivos el "espíritu y la lucha" de los militantes del POUM y elogió la trayectoria de sus líderes, Joaquín Maurín y Andreu Nin, que supieron resistir al estalinismo. También Llamazares destacó la importancia de la unidad de la izquierda sin renunciar a la pluralidad ni al debate interno. A su juicio, es necesario recuperar esa filosofía para hacer posible la "refundación de la izquierda española en clave republicana". En un discurso de gran contenido político e histórico, Llamazares reconoció al POUM como parte esencial de la memoria de la izquierda española.

Desde ERC, la diputada Laia Cañigueral, se congratuló de que 30 años después de la muerte de Franco el Congreso de los Diputados albergue un "acto de Justicia" como el homenaje a Solano, al que trasmitió el "reconocimiento" de su partido. Como joven, saludó al secretario de las Juventudes Comunistas Ibéricas. Cañigueral repasó parte de la historia "falseada, ocultada y enterrada" del POUM y se declaró admiradora del "testamento de un revolucionario del siglo XX", como Solano.  
El último en tomar la palabra fue Wilebaldo Solano, el homenajeado, quien, en lugar de hablar de sí mismo, hizo una emocionada evocación las figuras de Andreu Nin y, en especial, de Joaquin Maurín, diputado del POUM en 1936 que permaneció en las cárceles franquistas durante una década, reclamando que el Parlamento le reconozca como "una de las grandes figuras de las resistencia al franquismo".

Solano subrayó que el POUM "no quiso transigir jamás al estalinismo" y animó a todos los presentes a "seguir luchando por el socialismo". "¿Cómo después de 150 años de socialismo vamos a claudicar?, ¿cómo después de las luchas enormes en España vamos a retroceder?, ¿cómo podemos dejar que renazca en España una historia vil, asquerosa, repugnante en los medios de la derecha?", se preguntó.  Y él mismo se dio respuesta reclamando, frente a la actual derecha española, una reacción seria, decidida, serena y clara por la libertad y por el socialismo. También reclamó un esfuerzo para "olvidar las cosas que en el pasado separaron" y para "levantar las banderas del presente y del futuro".

Tras afirmar que la lucha del POUM, el exilio y la cárcel no fueron en balde mencionó las "debilidades" del capitalismo y advirtió de que "al corazón y la conciencia de miles de hombres no se les engaña así como así". "Viva el socialismo, viva la unidad socialista, viva la unidad de todos los trabajadores", proclamó como colofón, arrancando otro "viva" del auditorio que puso fin al acto aplaudiendo puesto en pie.


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