Trasversales
Lois Valsa

Panorama expositivo-cultural otoñal 2011 en Madrid

Revista Trasversales número 25, enero 2012

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Contexto de la(s) crisis: ferias, galerías y artistas

Podemos comenzar, aunque parezca raro, por Art Basel Miami, una feria de arte que ya ha cumplido sus diez años y que es el faro optimista del arte. Como decía un crítico de arte, es “la feria dónde las galerías que creían que esto del arte tenía que ver con las ideas, con cierta rebeldía o con pensar, están vacías” (David. G. Torres, El cultural, 09/12/2011). En medio de la gran crisis reina allí el optimismo, los colores y el dinero. O como decía un taxista cubano: “el año pasado notamos la recesión, este año no”. En esta feria prima la pintura y aquí el video está condenado porque el dinero apuesta por lo seguro y por el optimismo. ¡Preocupaciones fuera! En Miami no hay mucho espacio para el debate y la reflexión ni para cuestionarse el tinglado del arte. Es cierto que ha hecho florecer la ciudad y logrado que se abran espacios de arte nuevos y nazcan ferias paralelas. Incluso, en la misma feria, se han ampliado las galerías hasta en un 50%. En esta feria estaban las conocidas de todos los años galerías españolas Elvira González, Juana de Aizpuru y Helga de Alvear y otras que acuden ahora como Maistervalbuena, Nogueras Blanchard, Parra Romero o Travesía Cuatro. Estas, desde luego, en general han apostado por las ideas o la densidad conceptual.

La crítica del ABC Cultural, Laura Revuelta, lo tiene muy claro: “En Miami todo es una impostura e impostado”. Según ella, aquí prima lo políticamente correcto hasta en la indignación (y en lo ecológico: la zona “Art Nova” de la feria tiene un espacio verde artificial) cuyo ejemplo es el artista brasileño Paolo Nazareth, que se vendía a sí mismo como “imagen de un hombre exótico en venta”. En Miami, Ai Weiwei, el disidente chino, clásico de la feria y ahora con fama global, cotiza al alza. Por otra parte, sólo Warhol se salva de la quema mientras se castiga a los premios Turner. Quizá por ello la Sala de la Comunidad de Alcalá 31 nos ha castigado, aquí en Madrid, con la banal exposición de Martin Creed. ¡Lo que no han hecho ni siquiera en Miami lo hacen aquí (ya habían presentado otra de Yinka Shonibaré)! Sin embargo a los artistas latinos y a las galerías latinas y a los coleccionistas de los países emergentes les va muy bien en Miami. Quizá influido todo ello por el hecho de que los países emergentes y en concreto Latinoamérica estén sufriendo menos la crisis. ¿Será Miami una prueba de fuego para ver qué galerías se salvarán de la crisis? No hay que olvidar que tres centros de arte, aunque por distintas razones, han cerrado durante este año 2011: el Chillida Leku, el Gustavo Torner de Cuenca y el Oscar Niemeyer de Avilés.

Si en Basel Miami no hay mucho espacio para las ideas, en Inglaterra parece que también andan faltos de ellas cuando tienen que recurrir al premio Turner Damián Hirst que desapareció del faro iluminador de Miami. A este pionero del Britart se le dedican nada menos que dos retrospectivas: una a cargo de la pública Tate Modern y la otra en la red Gagosian de galerías privadas, once distribuidas por todo el planeta, que presentarán los tediosos y obsesivos cuadros punteados del artista. Las dos de Londres concentrarán las integradas por puntos. Su célebre cráneo con diamantes será expuesto en la Sala de Turbinas. Damián Hirst, de cuarenta y seis años, sigue, pues, ocupando la escena central del arte contemporáneo. En el verano de 2008 vendió, en subasta directa y prescindiendo del sistema tradicional de galerías, su última producción por 140 millones de euros. Esta puja coincidió con la catástrofe financiera: el colapso de Lethman Brothers precipito el hundimiento de los mercados financieros y esta crisis. Pero muchos especuladores de este casino global también han hecho negocio con ella. Algún millonario como Warren Buffet al menos ha pedido que le suban los impuestos. Inside Job y Margin Call han reflejado este caos global en el que estamos sumergidos. El negocio financiero y el negocio artístico son partes unidas de la misma locura de un sistema dónde campa la especulación por doquier y se multiplican las burbujas a nivel global.

Otoño expositivo-cultural madrileño

No puede decirse que en Madrid haya bajado el nivel expositivo aunque sí ha cambiado, ciertamente, tanto la cantidad, cada vez menor, como la duración de las exposiciones, que permanecen durante más tiempo en las salas y galerías. Éstas hicieron su apertura coordinada en septiembre (Apertura Artemadrid, 15-17/9/2011), y por lo que algunos galeristas me contaron decían sentirse satisfechos de los resultados de esos días. Luego, en la feria de Estampa en la que se ha reducido el espacio y se han diversificado las actividades artísticas, aprecié división de opiniones, pero al menos se ha logrado mantener la feria. Todas las miradas están ahora puestas en la próxima feria de Arco, dirigida por Carlos Arroz por segundo año, que será como todos los años a mediados del mes de febrero. Por el momento, a continuación voy a referirme a los espacios artísticos de Madrid y ver algunas de sus actividades durante este otoño y parte del invierno.

El museo Reina Sofía: exposiciones, artistas y posicionamientos críticos

Empezaré, en primer lugar, por el museo Reina Sofía que bajo la firme y eficaz dirección de Borja-Villel ha seguido siendo, para contento de unos y para disgusto de otros, un verdadero centro de “resistencia cultural”. Todo ello a riesgo de que algunos lo interpreten como línea ideológica de marxismo clásico al aceptar que la producción y exhibición del arte va más allá de la elaboración de un objeto y su presentación en una institución. Este punto de vista, como dice la crítica de arte Ángela Molina, que el director demostró en su lectura de las vanguardias de los años veinte y treinta y en el segundo tramo de la colección presentado hace un año (¿La guerra ha terminado? Arte en un mundo dividido 1945-1968). En este año comienza la tercera parte de la colección (De la revuelta a la posmodernidad), que "testimonia las resistencias poéticas del arte en Europa, el desafío al canon occidental y masculino, la expansión de la escultura y la cultura popular con su cuestionamiento de la imagen fotográfica y de su empleo para el registro y la publicidad, para acabar atrapando por la cola el final de la forma artística que se llama 'modernidad' y que inagura la modernización como proceso socioeconómico que busca reconciliarse con el público, de quién se decía que había sido alienado por el arte 'demasiado' conceptual de las décadas anteriores". Sigue Ángela Molina: "en esta fase asistimos a un nuevo posicionamiento contra el arte elevado y la figura del autor, contra la modernidad centrada en la visión, el material y la forma, y una ampliación de las preocupaciones posminimalistas a los procesos y la producción de la significación, actitudes que a finales de los sesenta anticipó de manera significativa el crítico y manager de la estética conceptual Seth Siegelaub y que tienen uno de sus muchos correlatos en los archivos de la arquitectura industrial europea de Bernd y Lilla Becher a partir de un contexto de estética (pos)minimalista, conceptos como la repetición, la dispersión y la dislocación, el cuerpo en movimiento, el 'deskilling'(sacrificio de la destreza técnica), lo 'pobre', las voces de las mujeres, la descolonización, las estrategias poéticas emancipatorias en América Latina y lo 'underground' avanzan en la colección como un tipo de producción artístico que ha llevado hasta hoy y que hunde sus raíces en la noción postestructuralista del texto fragmentado, contrapeso al modelo moderno de obra unitaria". Esta nueva lectura en sentido más institucional podría ser un “pretexto” para una presentación coherente de las nuevas compras, donaciones y depósitos (Sonnabend, Onnasch, De la Cruz, Vijande...) adquiridos por la institución durante los últimos años y que combinan materiales diversos e híbridos de todo tipo.

Además de esta tercera parte de la colección, el museo nos ha mostrado magníficas exposiciones en esta temporada otoñal como la de Espacio imantado de la brasileña Ligya Pape (1927-2004), una de las artistas mas experimentales que proviene del concretismo con Oiticica y Ligia Clark y del que pasa al arte neoconcreto cuyo manifiesto está considerado el inicio del arte contemporáneo brasileño. Pape integra las esferas estética, ética y política y trata de insertar la obra en la vida. Trasciende la visión local hacia un discurso internacional. Una hermosa exposición.

Fragmentos de la memoria de Elena Assins (Madrid, 1940), figura de la abstracción geométrica e integrante del Centro de Cálculo de la Universidad Complutense de Madrid. Assins fue una pionera en el uso en España de ordenadores para el proceso de concepción de las obras. Esta obra, al tiempo que le hace un homenaje tardío a la artista, recorre su variada obra desde finales de los años sesenta hasta la actualidad. Otra bella exposición que tengo que reconocer que me dejó asombrado al contemplar el conjunto de la obra.

La estrategia del juego de Alighiero Boetti (1940-1994) es la mayor retrospectiva del artista realizada hasta el momento y la primera en España que abarca desde 1966 hasta 1994. Boetti es uno de los artistas más fascinantes e influyentes de la segunda mitad del siglo XX. La exposición incluye sus enormes mapasmundi y sus bellos tapices realizados en colaboración con artesanos de Afganistán y Pakistán. Incluye su famosa bombilla colocada en una caja de madera que se enciende al azar solo durante once segundos cada año y una de las obras mas representativas de su producción “povera”. Una obra, pues, llena de poesía la de este artista.

En el espacio del Palacio de Velázquez del Retiro, Una exposición es siempre parte de un todo mayor de René Daniëls que muestra su trabajo en los años ochenta de una manera distinta a cómo se había hecho hasta ahora desde mitad de los setenta hasta 1987. Incluye grabaciones en Super 8 para mostrarnos su visión de la contracultura punk y de sus derivados. El artista sufrió luego una hemorragia cerebral y quedó imposibilitado. Últimamente se ha recuperado y va pintando lentamente: en la exposición hay obra última. Daniels intenta conectar el arte con la vida cotidiana y la cultura popular dando mucha importancia a la ambigüedad y los dobles sentidos.

En el espacio del Palacio de Cristal del Retiro, Escrito en los cuerpos celestes de Soledad Sevilla (1944) es una exposición creada ex profeso para dicho espacio. Consiste en una estructura de aluminio y policarbonato que reproduce la bóveda del palacio y recrea la imagen del cielo nocturno. A través de estructuras abstractas la artista muestra su interés por los valores atmosféricos y espaciales presentes ya en su creación bidimensional. Antes Soledad Sevilla había formado parte del Centro de Cálculo de Madrid (69-71) y realizaba pintura geométrica y seriada. Hoy se sitúa en la frontera de la escultura, el paisajismo y la arquitectura. Ha logrado una de las más bellas “ocupaciones” del Palacio de Cristal.

Entre/Between de A. Muntadas (1942) es una potente exposición de este artista internacionalmente reconocido y uno de los pioneros del arte conceptual y de medios. Esta muestra recorre desde los años sesenta hasta la actualidad enseñándonos todos los medios que ha utilizado el artista durante todos estos años para tratar asuntos claves de nuestro tiempo, tanto políticos como sociales. Su trabajo comprometido, muy a tono con la investigación del Reina Sofía, investiga en profundidad y directamente situaciones políticas y culturales y ha indagado especialmente en ideas como la relación de público y privado, los flujos de información entre los medios (el tema de la comunicación es prioritario), y las dinámicas de la arquitectura oficial, los sistemas de poder visibles e invisibles (sobre todo en la serie On traslation, aún en fase de realización), de una sociedad dominada por los espectáculos de los medios de masas, el hiperconsumo y los constantes avances tecnológicos. Es una exposición muy densa dividida en nueve Constelaciones y una Situación 2011 en las escaleras del edificio Nouvel en la que indaga a través de imágenes de entrevistas en la integración del edificio Jean Nouvel en el de Sabatini como ya lo había hecho en la anterior exposición de Híbridos (1988) en el museo Reina Sofía, en relación al edificio Sabatini de antes y el actual. Para mí, además de muy necesaria sobre todo en estos tiempos confusos que vivimos, es la exposición puntera del museo y la más acorde con su actitud “resistente” y “comprometida”. Muntadas también sigue investigando, como ya he dicho, en los límites del museo (“entre”) como Institución. Lleva a cabo, en suma, una tarea crítica institucional dentro de la propuesta de una tercera ola de crítica institucional mas allá de Didí Huberman y Ranciére.

Locus Solus. Impresiones de Raymond Roussel es la primera exposición que se realiza sobre la figura del poeta, novelista y dramaturgo R. Roussel (1877-1933) y su influencia artística y literaria en el arte contemporáneo. El título de la muestra hace referencia a sus dos novelas mas conocidas: Locus solus e Impresiones de Africa. Roussel nos ha dejado una obra poética, novelística y teatral sin precedentes en la historia de la literatura tanto por sus universos como por su método de escritura. Precisamente, al reseñar esta exposición de casi medio millar de piezas el crítico de arte F. C. Serraller, en el suplemento Babelia de El País, nos señalaba algunos aspectos de mucho interés en relación a Roussel como que el imaginario de Roussel poseyó, por otra parte, una dimensión visionaria-visual que cautivó tanto o mas a los artistas que a los propios escritores, lo que acredita el sentido y la oportunidad de la exposición. Pero en este caso la reseña del crítico es importante porque nos habla también del museo que lleva a cabo tal exposición: “De todas formas nos encontramos con una exposición compleja que aborda el arte desde una perspectiva crítica, aportando información y buscando dar qué pensar al visitante, una exposición, en suma, que subsume lo que se ve en las obras concretas que se exhiben a la necesidad de comprender la visión que las ha inspirado. No se debe esto sólo al hecho de que el hilo conductor sea solo literario, sino al designio didáctico actual de cierta museología por rediseñar los referentes de la memoria- crear un nuevo modelo de archivo- y enfatizar la dimensión conceptual e ideológica de la práctica artística. Aplicar este modelo a Roussel es todo un desafío porque es un autor fascinante y furtivo, pleno de equívocos, y, por tanto, refractario a cualquier lógica, sea cual sea la índole en la que se emplace”. ¡Perdón por esta cita tan larga pero es que es muy enjundiosa y sobre todo directa! En este sentido, F. C. Serraller piensa que la exposición acierta en lo que se refiere a los surrealistas y, en particular, Dalí pero “el amplio resto (de artistas) quedan mas prendidos en la trama por alfileres y comparecen en ella de una muy diversa forma indirecta, con lo que su presencia es aleatoria… Sea como sea, esta dificultad acrecienta el mérito de los responsables de esta muestra que es la primera dedicada monográficamente a mostrar la influencia de Roussel en el arte del siglo XX, pero lo principal de este mérito consiste en la ambición de seguir las huellas no tanto de su nombre, sino de su revolucionaria forma de ver y relacionarse con el mundo sin tener en cuenta el espeso lastre de lo real. También es muy interesante el esfuerzo realizado por conectar a Roussel con temas y encrucijadas frecuentados por el arte de vanguardia del primer tercio del siglo XX, desvelando de esta manera coincidencias y no solo influencias, lo cual sirve para adentrarnos en la reflexión sobre el destino histórico del arte de nuestra época”. ¡Pocas veces una reseña está tan bien aprovechada hasta el final!

Hemos visto aquí un interesante punto de vista sobre la tarea museística del museo Reina Sofía que conlleva una alabanza a la dificultad de su tarea sobre todo en el caso de un personaje como Roussel. Sin embargo, más crítico con la política de exposiciones del museo se mostraba el crítico Ángel Gonzáles en una corta conversación con el diario Público con ocasión de la publicación de su último libro. Este crítico, además de cuestionar todas las actividades artísticas, incluidas las de coleccionista, de la baronesa Thyssen, criticaba, a diferencia de Calvo Serraller, radicalmente “las exposiciones de ideas” como reaccionarias cuyo ejemplo más directo serían las del museo Reina Sofía. González defiende un arte “sensorial” frente al de “ideas” que no ayuda a los más desfavorecidos que además tienen que trabajar más. El arte debe “curarles”.

El museo Reina Sofía complementa estas exposiciones con un potente programa de Actividades (se pueden ver en una pequeña guía), empezando por la celebración, como museo llamado desde su fundación a custodiar, exhibir e interpretar el cuadro, de los Treinta años de Guernica, 1981-2011 con la conferencia magistral (Otra mirada al Guernica) de Timothy J. Clark. Además de un ciclo de música de sonidos contemporáneos, un seminario (La producción cultural a debate), un ciclo de video y performance (La internacional cuir), un ciclo audiovisual en relación a la exposición de Ligya Pape (Cuando Brasil devoró el cine, 1960-1970) y Un ciclo de cine con conferencias (Oteiza y el cine), la presentación de la publicación “Repensar la dramaturgia”. Por otro lado, las conferencias, encuentros y posterior debate con los artistas que ha expuesto en esta temporada en el museo. Una mesa redonda, artefactos de acción directa, es un encuentro ideado para discutir sobre los procesos de articulación de herramientas capaces de renovar los roles habituales del arte contemporáneo. Por último, las actividades educativas con talleres para jóvenes y talleres para niños e itinerario con música en directo para niños y un punto de información de educación. Por todo ello se puede decir, en definitiva, que, a pesar de ser un Museo, el museo Reina Sofía está muy vivo.

Otros espacios artísticos

Pero en Madrid hubo también otras exposiciones de mucho interés en otros espacios artísticos de la capital durante este otoño. En La Casa Encendida no se puede dejar de ver una de las exposiciones más interesantes que se han visto en Madrid en mucho tiempo como es la de La caballería roja. Creación y poder en la Rusia soviética de 1917 hasta 1945 sobre la evolución de la intelectualidad rusa desde la revolución de 1917 hasta el realismo socialista y la guerra “patriótica”; y sobre todo cómo el subtítulo aclara sobre las complejas relaciones de creación y poder en la Rusia soviética. Su título proviene del título de una novela de Isaac Bábel y tiene que ver con el cuadro de Malévich que abre la exposición. Reúne una serie muy abundante y valiosa de pinturas, diseños, objetos, libros, fotografías documentos y filmaciones que nos facilitan la reconstrucción y comprensión de ese periodo tan convulso. Los carteles, los libros y las revistas, con audaces innovaciones tipográficas para la época y su potente carga ideológica señalan con claridad el arte utilitario que se apoyó desde el poder. Es una exposición muy densa en la distribución de su contenido, proveniente de archivos rusos y con frecuencia material inédito que ocupa dos plantas y diferentes salas pero con un discurso historiográfico muy atractivo y didáctico. La comisaria Rosa Ferré ha organizado los temas y puesto en orden las obras con una actitud dinámica. El catálogo con ensayos claros ayuda a entenderla aún mejor. Algunos se han emocionado al escuchar como música de fondo “La Internacional”. A medida que se avanza en las salas ordenadas cronológicamente se va viendo el vacío intelectual y artístico que va creando la represión totalitaria (por ejemplo: “de 700 autores del Primer Congreso de Escritores de Moscú en 1934, a la muerte de Stalin sólo quedan 50”). No estaría de más que la revisión que plantea esta exposición sobre el arte soviético, dentro del oficial Año Dual Rusia-España 2011, se aplique ahora también al arte occidental en el que, como he señalado en la introducción de este texto, los artistas, supuestamente libres, se han sometido a la clase económica que domina la especulación artística. Por otra parte, este centro atípico, además de otras exposiciones como Migraciones. Un planeta en movimiento, o la del joven artista Julio Falagan (Valladolid, 1979), un artista crítico con el mercado del arte, con el concepto de autoría y con el empleo de recursos y energías; o la importante exposición (en colaboración con otros museos como el MUSAC de León) que se hizo sobre Gervasio Sánchez, Los desaparecidos, no hace tanto), organiza un montón de actividades de todo tipo y en todos los formatos.

Esta exposición anterior se complementa muy bien aunque sin pretenderlo con la exposición de Aleksandr Deineka (1899-1945), una vanguardia para el proletariado en la fundación Juan March, otra exposición de tesis como es costumbre en las exposiciones del comisario Fontán y su equipo. Dos exposiciones extraordinarias y complementarias que nos ofrecen como oportunidad única el poder ver la vanguardia rusa revolucionaria y posrevolucionaria como no se había visto nunca por estos lares y quizá tarde en volver a verse. Una vez más se ha llevado a cabo un riguroso trabajo de investigación sobre este artista ruso que va evolucionando desde la vanguardia hasta el realismo socialista. El material “documental” que se recogido lo mismo que en la exposición anterior es cuantioso y en cierta manera en este contexto muy concreto pasa a ser “obra de arte”. Este material proviene de archivos españoles algunas veces, curiosamente en el caso de Deineka. Pero no se refiere únicamente a este artista sino también a otros que apoyan el punto de vista de la exposición. El director de exposiciones de la fundación tiene una querencia que es de agradecer, nos gusten más o menos sus propuestas, por el remar contra la corriente. Además trabaja siempre con gran perspectiva: esta exposición completa un ciclo de tres exposiciones (las otras dos fueron La vanguardia rusa y Borys Groys. Arte oficial soviético. En la fundación como siempre hubo, en relación con la exposición, conferencias y un ciclo de música (Música soviética de la revolución a Stalin). Y, claro está, muchas actividades pedagógicas.

El CaixaForum cerraba en septiembre dos exposición de gran interés: la primera, Construir la revolución. Arte y arquitectura en Rusia, 1915-1935, se puede relacionar, por su temática, con las anteriores; y la segunda era Teotihuacan: el esplendor hecho cultura. Y en octubre se presentaba, como la mayor retrospectiva internacional en medio siglo y la más completa en España, la gran exposición sobre el genial pintor romántico Delacroix (1798-1863). Esta exposición, que reúne más de 130 obras provenientes de colecciones públicas y privadas de Europa y América, está comisariazada por el conservador jefe del Departamento de Pintura del Museo del Louvre, Sébastien Allard. Pretende, además de reconstruir la evolución del artista desde sus inicios hasta la etapa final, dar a conocer, A TRAVÉS DE SUS DIARIOS, una nueva imagen del pintor alejada de su asociación con las grandes composiciones de tema histórico, como un revolucionario enfrentado a las convenciones del arte neoclásico. Según él, lo que provocaba emoción en un lienzo eran sus valores plásticos-materia, luz y color- más allá de las escenas que se representan. Para ello, junto a los óleos de gran formato, se muestran bocetos, dibujos, acuarelas y grabados que “ofrecen un testimonio de la vida interior del artista y lo aproximan a la sensibilidad contemporánea. Como siempre la exposición se acompaña de una temporada musical en torno a Eugene Delacroix, y de conferencias sobre el pintor y su época. Caixaforum, por otra parte, realiza conferencias y debates y otras actividades sobre una enorme variedad de temas.

También CaixaForum ha presentado La persistencia de la geometría. Colecciones de arte contemporáneo MACBA- Fundación “la Caixa”. La exposición recorre las líneas discursivas de las colecciones en torno al uso de la geometría en la escultura y la instalación desde los años sesenta hasta nuestros días. Se trata de la segunda de la serie de grandes exposiciones organizadas a partir de los fondos de ambas instituciones con el objetivo de ofrecer diversas lecturas de las 5.500 obras que conforman la nueva colección. La primera había sido ¡Volumen! en el Museu d¨Art Contemporani de Barcelona en el mes de noviembre. Esta exhibición de esculturas y videoinstalaciones es de una gran belleza y potencia artística al fundirse las obras de dos colecciones que se complementan muy bien. Muestra la recurrencia a la geometría en la escultura y la instalación y la ruptura de las formas tradicionales y la redefinición de la obra de arte que, a través de la experiencia de la forma y del espacio, busca la participación activa de los espectadores.

En la Fundación Thyssen se presentó, en colaboración con Caja Madrid y sus salas de Las Alhajas, una de sus más importantes exposiciones, Arquitecturas pintadas. Del Renacimiento al siglo XVIII. Una exposición comisariada por la museóloga Mar Borobia del museo y por el profesor Delfín Rodríguez en la que se funden pintura y arquitectura de una manera admirable. Los comisarios venían fraguando esta exposición, que se organiza siguiendo un orden cronológico y temático (en las salas del Thyssen se muestra desde el XIV al XVII y en Las Alhajas el siglo XVIII con obras de los grandes maestros de las vedute), ya desde 2008 por lo que ha sido un proyecto de largo recorrido. Constituye un conjunto selecto y apretado de 143 obras, muchas de ellas de calidad excepcional, que sirvieron a sus autores para inventar las reglas y criterios que definieron las formas y los estilos caracterizadores de las arquitecturas pintadas. Muestra la evolución de la arquitectura como escenario pictórico: obras como ventanas con un montaje escenográfico. En esta exposición los anónimos ocupan un lugar importante y muchas obras son inéditas.

Otra delicada exposición del Thyssen es la de Berthe Morisot. Una pintora impresionista que contiene un buen número de obras de esta pintura relegada por sus compañeros varones impresionistas a pesar de su relevancia y de sus importantes exposiciones. En ella aparecen cuadros importantes de algunos de sus compañeros que contrastan y refuerzan la exposición.

El MUICO, Museo de las Colecciones ICO, ha presentado, ¡A vueltas con la maldita pintura!, la primera de una larga serie de exposiciones dónde invitará a distintos artistas representados en sus fondos a “apadrinar” a uno o varios artistas más jóvenes. Se trata de una iniciativa, que, bajo la idea de relevo o puente intergeneracional, de reemplazo o diálogo, ha sido ya ensayada en distintas momentos por otras instituciones parecidas. Por mi parte, creo que esta forma de exponer, como relectura de la propia colección que ha caracterizado la programación del museo desde sus comienzos, se adecua muy bien a la crisis, incluido su sencillo pero de calidad catálogo, al tiempo que pone su colección cerrada puesto que desde hace tiempo no se amplía en comunicación con la creación más actual.

En la Biblioteca Nacional se presentan tres exposiciones como La química de los libros hasta el quince de enero, y José Rizal, escritor sobre uno de los ideólogos de la independencia filipina en su faceta de escritor y hombre de letras; y, por último, Biblioteca Nacional de España: 300 años para celebrar el nacimiento de la institución.

En el Fernando Fernán Gómez se presentó la exposición Viaje al cine español 1987-2011. 25 años de los Premios Goya. con un interesante montaje que nos permitía recorrer y visualizar las películas más importantes de esa etapa del cine español.

En la Fundación MAPFRE de Recoletos se montó todo un homenaje al diseñador Yves Saint Laurent, genio frágil y autodestructivo nacido en Orán en 1936 en el seno de una familia burguesa y muerto en 2008. Está coproducida por la Fundación Mapfre y la de Pierre Bergé, compañero en la vida y en la obra del modisto y recoge la mitad de los modelos que se expusieron en el Petit Palais de París en 2010 pero en Madrid se incide más en el proceso creativo. Esta exposición está comisariada por Florence Müller y reúne 141 modelos de uno de los grandes de la moda que entendió como ninguno las contradicciones de la mujer moderna, las hizo suya, y a su manera dramática (como no podía ser de otra manera en su atormentado carácter) les dio vuelo eterno. Como nos aclara la comisaria: “es que la moda ahora es una cuestión más de dinero que de pasión”. Estamos ante una exposición muy bien montada y muy diáfana en su recorrido de gran belleza plástica que nos muestra un mundo de la moda en estado puro lejano de la uniformidad que establecen las multinacionales de lujo en el que se planteaba la seducción como expresión profunda de la feminidad y como expresión liberadora. Hasta a alguien como yo tan poco interesado en la moda llegó a resultarle atractiva esta muestra. Las exposiciones de Mapfre suelen ser en general de gran interés y muy variadas si se salen de “lo moderno”. “es nuestra primera gran exposición de moda”, y, según su director general Pablo Burillo, todo lo que sea subrayar sus vinculaciones con el arte nos importaba”. Se organizaron unas conferencias paralelas a la exposición.

La Fundación Mapfre, que cuida mucho las exposiciones de fotografía, también montó una interesante exposición de fotografía fuera de su sede, en La Academia de Bellas Artes, Una imagen de España. Fotógrafos estereoscopistas franceses (1856-1867) como una vuelta al pasado y a un tipo de fotografía panorámica. Una recuperación fotográfica a partir de una intensa investigación de sus comisarios. En su sede de AZCA dedicada a foto, Mapfre ha montado la primera exposición en España sobre Gottard Schuh (1897-1969, el fotógrafo suizo más importante que empezó siendo pintor e incluso al final volvió a la pintura. Recorre en cinco apartados sus etapas mas importante y su última fase se la dedica a la asociación de fotógrafos suizos fundada en 1950, “Kollegium”. Esta sala la comparte Schuh con otros fotógrafos de la asociación como Werner Bischof, Paul Senn, Jakob Tuggener y Walte Läubli. Para su segunda exposición, titulada “La fotografía como expresión”, la asociación incorporó al elitista grupo una selección de jóvenes fotógrafos, entre ellos Robert Frank, con obras como “Funeral, Barcelona (1951) o “Valencia” (1950), de gran tristeza existencial, y René Groebli... A pesar de su éxito de público Kollegium se disolvió en 1956 debido a divergencias de opinión entre sus miembros. Finalmente, el interesante catálogo de esta exposición está llamado a ser una publicación de referencia en torno a la vida y a la obra del fotógrafo. Mafre ha organizado como siempre, además de una web monográfica sobre la muestra, visitas-talleres dirigidas a colegios y familias.

El Círculo de Bellas Artes ha seguido con sus importantes exposiciones. Este otoño ha montado Pierre Bourdieu. Imágenes de Argelia en la que ha recuperado las fotos que el sociólogo francés había guardado en cajas de cartón durante cuarenta años. Esta muestra está englobada en el proyecto Magreb: Dos orillas, “un completo programa de actividades en torno al Magreb que pretende acercarnos a este territorio mediante su creación artística y el análisis de su evolución cultural, social y política en relación con su contexto mediterráneo”. Consta la muestra de ciento cincuenta fotografías sobre la realidad social y etnográfica de la Argelia de los años cincuenta. Nos enseña “la construcción en la mirada del sociólogo y la plasmación de documentación y estética en una composición lógica”. Porque en Argelia se afirma, a finales de los años cincuenta, la vocación sociológica de Bourdieu. Su mirada políticamente comprometida anticolonialista O como él mismo decía que concebía sus fotografías como una forma de compromiso político y no solo como un testimonio: ver para hacer ver, comprender para hacer comprender. Dentro del proyecto se ha montado la exposición Magreb: Dos orillas que, comisariada por Brahim Alaoui, reúne el trabajo en distintos formatos de trece artistas magrebíes provenientes de Marruecos, Argelia, Túnez y Europa. “Pretende ser una caja de resonancia de las correspondencias geográficas y culturales entre creadores de ambas orillas del Mediterráneo, así como alimentar una dialéctica apasionante entre lo local y lo global”.

En otro proyecto que se relaciona con la presidencia polaca de la UE en 2011 se han montado en el CBA una exposición, un ciclo de cine II Festival de cine polaco) y varios simposios como una aproximación a Polonia a través de su cultura. Concretamente, la exposición El pensamiento cautivo. La tiranía de la imagen en la fotografía artística polaca después del año 1945, que se inspira en la obra de Czeslaw Milosz. Esta exposición que consta de 65 fotografías de los artistas polacos de esa época construye “un retrato fotográfico de toda una generación confrontada con el totalitarismo y plantea preguntas sobre el fenómeno del pensamiento cautivo en las sociedades contemporáneas”. El simposio que se celebró los días 3 y 4 de octubre se dedicó a la obra del gran poeta Milosz, galardonado con el Premio Nóbel de Literatura en el año 1980, y su percepción en el mundo.

El Museo de Historia acoge la exposición El socialista, 1886-2011 como una mirada a la historia de España a través de periódico que cumple 125 años. La muestra recorre en siete secciones cronológicas la historia de la publicación desde su nacimiento en 1986 hasta la actualidad. La prensa era en ese momento un instrumento fundamental de losa partidos políticos. Por ello Pablo Iglesias fundó el periódico, portavoz primero del partido, y a partir de 1888 también de la UGT. Cuenta con más de 150 objetos todos ellos originales entre los que destacan fotografías ejemplares del periódico en sus diversas etapas, la colección de sus almanaques, los extraordinarios de la República, varias prensas de época y una multicopista y planchas y otros objetos. Ha sido organizada por la Fundación Pablo Iglesias, con la colaboración del Área de Las Artes del Ayuntamiento.

También en la sala 3 de Conde Duque, dependiente del Ayuntamiento, ya restaurada, se ha presentado la muestra con obra del artista toscano Marino Marini (Pistoia, 1901- Vareggio, 1980) considerado uno de los más importantes representantes de la escultura figurativa del siglo XX. Esta exposición se presenta por primera vez en Madrid y es la primera antológica de este artista que se celebra en España. Consta de un total de 75 piezas entre esculturas, pinturas y dibujos, que dan cuenta del estilo y los temas más importantes en la obra del artista italiano. La Toscana es la cuna de la civilización etrusca desde el siglo VII a. C y este artista siempre se consideró el heredero artístico de ese pueblo: “yo no me inspiro en los etruscos, soy un etrusco”.

En la Fundación Canal se ha presentado la exposición Observados. Voyerismo y vigilancia a través de la cámara desde 1870, otra historia de la fotografía en la que se muestra cómo la sociedad es controlada por mil cámaras. Creo que es una de las mejores exposiciones de fotografía de las qué han podido verse en Madrid en bastante tiempo. Es pues una estupenda selección de fotos que trata de llevar a cabo una Historia de la mirada que va contra la intimidad penetrada por la vigilancia y el voyeurismo en este siglo nuestro que ha terminado siendo foucaultiano al estar el panóptico distribuido ya por todas partes. Un siglo en el que los ciudadanos están en el umbral de ser permanente y globalmente observados y controlados. En esta exposición, en la que se muestran magníficas fotos de grandes fotógrafos, está montada por el San Francisco Museum of Modern Art y la Tate Modern y su título original es Exponed. Voyeurism, Surveillance and the Camera. ¿Por qué cuatro apartados sobre voyeurismo y uno sobre vigilancia que desnivelan el equilibrio temático de esta exposición? El comisario me respondió que así venía montada de origen y se había respetado.

En el Centro de Exposiciones Arte Canal se presentó la espectacular exposición Da Vinci, El Genio, que es un proyecto generado por Canal de Isabel II, la Fundación Anthropos y Pascal Cotte, y que nace con el objetivo de mostrar al público los aspectos menos conocidos de uno de los personajes más complejos de la Historia, Leonardo da Vinci. En esta exposición han colaborado 29 prestigiosas instituciones y museos nacionales e internacionales que han cedido obras nunca antes expuestas en España. Un personaje complejo el de Leonardo que al tiempo que creaba obras de deslumbrante belleza concebía terroríficas armas de guerra que traerían muerte y destrucción.. Diseño máquinas para llegar al fondo del mar y para volar pero más tarde su legado quedó olvidado durante siglos permaneciendo en el ámbito de la especulación teórica sin llegar a la práctica…hasta ahora que se han retomado sus grandes inventos y se han hecho experimentos. La muestra se ha dividido, además del Área O, en dieciocho Áreas y un Audiovisual Documental de la BBC, El hombre que lo quería saber todo, de cincuenta minutos. También con su video en 3D en el exterior.

El Prix Pictet sobre Fotografía y Sostenibilidad ha presentado en Madrid su exposición Crecimiento (Growth) en el Real Jardín Botánico, CSIC, de Madrid, una selección de las fotografías finalistas en la tercera edición del premio. No hay que olvidar que El Prix Pictet, instaurado en 2008 por el banco privado suizo Pictet and Cie, es el certamen más importante a nivel internacional dedicado a Fotografía y Sostenibilidad. Cada año, y dentro de un tema general, el Prix Pictet se embarca en la búsqueda de imágenes que sean capaces de transmitir mensajes impactantes y que posean una relevancia medioambiental a nivel global. Esta edición que se había presentado en París en mayo pasado y que se había exhibido por varias ciudades de todo el mundo contó con doce finalistas En este premio suelen participar fotógrafos de reconocido prestigio internacional tanto a nivel de Comisión como de participantes.


 

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