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Angel Rebollar López

La moción de censura y sus consecuencias

Revista Trasversales número 41, junio 2017 web

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La moción era necesaria a pesar del resultado consabido. Ante la apatía de los demás, unos por afinidad como los "falangistas" (Cs) y otros por inseguridad como los socialistas, le tocaba a Podemos sacar toda la mierda del PP y ponerla sobre la mesa, para lanzársela a la cara de los corruptos y el trabajo se hizo por dignidad ciudadana.

Lo primero a resaltar es el buen trabajo de Irene Montero. Personalmente nunca ha sido de mis preferencias, pero he de reconocer que dio una talla muy alta. Realizó su trabajo de manera acertada, un papel difícil, con un relato extenso, muy pormenorizado y bien hilado que puso a Rajoy contra las cuerdas, de las que sólo salió con sus silogismos habituales mal tratados gramaticalmente, que avergonzarían a cualquier humano y a él le resbala siempre que le aplaudan sus palmeros. Creo que Irene brilló por encima de las demás intervenciones.

La moción evidenció dos cosas, Podemos no está en condiciones de gobernar y el PP lo hace sin apoyos necesarios, está en la cuerda floja, sólo se necesita un pequeño empujón para hacerle caer.

Podemos y su secretario Pablo Iglesias salió con dignidad y reforzado. Dejó en evidencia a RAJOY y evidenció el sometimiento de Rivera y los suyos a los mismos dueños que tiene el PP (la banca y el IBEX 35). Realizó un necesario propósito de enmienda, respecto a su actuaciones del año pasado, extendiendo la mano al PsoE. Esta es la parte más positiva de la moción, por ser imprescindible para un cambio de Gobierno.

Podemos y PsoE deben hacer una reflexión, ambos se necesitan y una vez aclarado su espacio social sólo queda un pequeño espacio donde compiten con el electorado. Es evidente que muchos de los que estamos en podemos nunca hemos votado ni votaremos a los socialistas, igual sucede a la contra, ahora con las esperanzas creadas por Pedro Sánchez en sus militantes, a los podemitas se les hace imposible influenciar en los sanchistas, al menos a corto y medio plazo, a no ser que medien errores que no se cometerán. Deben abandonar esa pelea, reforzar su espacio político y desde la confianza abrir los espacios necesarios para que la situación política cambie. Tanto a los militantes y votantes de unos y otros les une la necesidad de resolver progresivamente la situación intolerable. Ambas afiliaciones saben que se necesitan para mejorar su situación y esto debe llevar a las direcciones a poner los medios para que esto se cumpla.

Se deben reunir y fumar la pipa de la paz, no se puede atender a varios frentes, esto debilita las fuerzas y consecuentemente la eficacia antes las urgencias que nos acosan, echar a Rajoy y al PP del poder, para impedir que siga con los recortes y pervirtiendo la justicia y la policía. Esto no es fácil, pero es necesario, si se mantienen las desconfianzas ambos se anularan y seguirá ganando la derecha del PP y Cs. Es urgente dejar la fagocitosis para otros momentos y evitar el ir a unas nuevas elecciones, que no variarán el computo global, aunque pueda haber beneficios mínimos de unos u otros. Deben reunirse con sinceridad, sin trampas con las cartas boca arriba y darse la tregua de tres años de gobierno, expulsando a los corruptos.

El PsoE cometerá un error si en lugar de mirar a Portugal, sigue pensando en el refrito con los "falangistas", y Podemos debe dar facilidades para que pueda cuajar un pacto a la valenciana. Intentar meter a Ciudadanos imposibilitará el acuerdo necesario. El PsoE debe mirar a los nacionalistas y buscar un acuerdo para Catalunya que sirva para destrabar la situación. Podemos tiene que ser más imaginativo y esforzarse en que el referéndum catalán no sea para el Sí o No, al irse o quedarse, sino la respuesta a una propuesta de encaje que pueda ser refrendada entre los ciudadanos catalanes.