Trasversales
Didier Epsztajn, Mariana Sanchez y Patrick Silberstein

La orquesta de los ciegos, de los sordos, de los amnésicos, de los charlatanes y de los cómplices ejecuta su partitura

Revista Trasversales número 61, febrero 2023 we

Este texto abre el nº 16 del boletín (en francés) publicado por las Brigades Éditoriales de Solidarité.

Pueden obtenerse gratuitamente todos los números aparecidos de ese boletín en syllepse.net/en-telechargement-gratuit-_r_20.html

Didier Epsztajn, Mariana Sanchez y Patrick Silberstein son miembros de las Brigades Éditoriales de Solidarité



Ciegos y sordos

Quizá no sepamos que hay mujeres y hombres de Ucrania que luchan contra la invasión de su país y contra las políticas neoliberales de su gobierno.

Quizá no sepamos que hay organizaciones sindicales, estudiantiles, feministas y políticas en Ucrania que comparten nuestras luchas y nuestras ideas.

Quizá no sepamos que en la Federación Rusa hay fuerzas antiguerra y progresistas, y que allí hay pueblos oprimidos.

Quizá no sepamos que hay fuerzas antiguerra y progresistas en Bielorrusia.

Quizá no hayamos oído a Putin hablando sobre la destrucción de Ucrania y la inexistencia del pueblo ucraniano.

Quizá no nos hayamos enterado de que los ejércitos de la Federación Rusa violaron las fronteras de un país independiente (crimen de agresión), bombardearon poblaciones civiles (crimen de guerra), deportaron a adult@s y niñ@s (crimen de guerra), usaron la violación como arma de guerra (crimen de lesa humanidad), etc.

Quizá no sepamos que si los ejércitos de Putin se retiran incondicionalmente de toda Ucrania, ya no habrá guerra y la paz volverá a ser una posibilidad.

Quizá no sepamos que si las personas ucranianas dejan de resistir, Ucrania será destruida como pueblo y como nación independiente.

Quizá no sepamos que Ucrania será destruida como nación independiente si la población ucraniana no cuenta con suficiente armamento.

Quizá no sepamos nada o muy poco. ¿Pero eso es razón para creer a los chalatanes?


Amnésicos...

Quizá hemos olvidado la distinción entre guerras legítimas, como las guerras de liberación nacional, y guerras imperialistas, de conquista o coloniales, guerras de opresión.

Quizá hemos olvidado que existe una diferencia fundamental entre una dictadura fascista y una república democrática, por imperfecta que sea. Quizá hemos olvidado que fuimos checos y luchamos contra la anexión de nuestro país mientras que algunos dijeron "no a la guerra" y los ejércitos nazis nos invadían.

Quizá hemos olvidado que éramos irlandeses y luchábamos contra la ocupación inglesa, mietras algunos decían "no a la guerra"... La partición de nuestro país dura ya más de un siglo.

Quizá hemos olvidado que fuimos resistentes en la Europa ocupada y que algunos nos llamaron terroristas y otros nos explicaron que ambos campos eran tal para cual.

Quizá hemos olvidado que fuimos germano-orientales, polac@s , húngar@s , checoslovac@s o afgan@s y que luchamos contra la ocupación y la invasión soviética mientras que algunos nos decían que teníamos que defender la "patria de los trabajadores" contra el imperialismo.

Quizá hemos olvidado que fuimos amerindi@s, que en África fuimos bantúes ovahereros o fuimos namaqua, o que fuimos armenios, mientras que algunos no hicieron nada contra los genocidios alemán o turco, o llegaron a aplaudirlos.

Quizá hemos olvidado que éramos african@s y que algunos no hicieron nada contra el comercio esclavista y hasta lo aplaudieron.

Quizá hemos olvidado que estábamos en algún otro lugar del mundo y que muchos no hicieron nada contra las colonizaciones o las apoyaron.

Quizá hemos olvidado que éramos españoles, catalanes, vascos... y que algunos se negaron a entregarnos armas para luchar contra los ejércitos de Franco.

Quizá hemos olvidado que éramos argelin@s y que luchamos por liberar a nuestro país de la colonización francesa, mientras que algunos se contentaron con decir "No a la guerra" y "Paz en Argelia".

Quizá hemos olvidado que éramos vietnamitas y que luchamos, primero, contra el ejército francés y luego contra el de Estados Unidos, mientras que algunos se contentaron con decir "No a la guerra" y "Paz en Vietnam".

Quizá hemos olvidado que éramos siri@s y que luchábamos contra la dictadura de Bashar al-Assad, apoyada por la Federación Rusa, mientras algunos decían "No a la guerra".

Quizá hemos olvidado que los compañeros de Karl Marx se alistaron en el ejército de la Unión para abolir la esclavitud.

Quizá hemos olvidado que anarquistas españoles entraron en París en tanques de la 2ª División Acorazada estadounidense.

Quizá hemos olvidado que éramos ruso@s, bielorrus@s, chechen@s, georgian@s, qué lo somos todavía y que luchamos, y seguimos haciéndolo, contra la dictadura gran-rusa, mientras que algunos nos dicen que Rusia no debe ser humillada.

Quizá hemos olvidado que el imperialismo estadounidense proporcionó armas a China para luchar contra el colonialismo japonés.

Quizás hemos olvidado que el imperialismo yanqui suministró armas al gobierno "soviético" para luchar contra los ejércitos nazis.

Somos chec@s, irlandeses, polac@s, húngar@s, vietnamitas, argelin@s, palestin@s, siri@s, saharauis, haitian@s, birman@s, uigures, kurd@s, peruan@s, nicaragüenses, ucranian@s.

Nuestras vidas y nuestras libertades justificaron y justifican nuestra resistencia al imperialismo y la dictadura.


Los charlatanes

No queremos que se nos silencie ni que nuestra seguridad sea despreciada en nombre de la paz entre las grandes potencias, en nombre del mantenimiento del orden mundial.

Los que apoyan dictaduras, apoyan a los agresores imperialistas, nos niegan el derecho a resistir (militarmente o no) para defender nuestras libertades, nuestros derechos nacionales, nuestros derechos como pueblos, nuestras conquistas sociales, no son nuestros amigos.

Aquellos que quieren desarmarnos en nombre de la "paz" eligen la destrucción de Ucrania y de su gente. Ayer Chamberlain (y el imperialismo británico) y Stalin (y su dictadura en nombre del sovietismo) apoyaron la paz con Hitler: el resultado fue el desmantelamiento de Polonia, la multiplicación de los campos de concentración, la industria estatal de la muerte y los campos de exterminio, una guerra mundial, millones de víctimas civiles y militares y un genocidio de las poblaciones judía y gitana...

Los que apoyan la invasión de Ucrania por los ejércitos rusos, los que no quieren dar a las poblaciones ucranianas los medios para resistir y liberar su país, no son nuestros amigos.

Los que hablan de "paz" para no apoyar el legítimo derecho a la autodeterminación de los pueblos ucranianos y su derecho a vivir, los que rompen con el apoyo a las luchas de liberación nacional, se equivocan y contribuyen a socavar los derechos de tod@s l@s ciudadan@s, en Ucrania y en el mundo.

¡Solidaridad!

Nota 1. Evidentemente, la referencias a sordos, ciegos y amnésicos es metafórica y se refiere a quienes no quieren reconocer o recordar aquello que contradice sus dogmas.