Gran parte de la extrema izquierda británica (grupos como Communist Party, Socialist Worker y Socialist Appeal) ven la invasión rusa de Ucrania como una guerra entre la OTAN y Rusia, librada en suelo ucraniano. Argumentan que Estados Unidos y la OTAN provocaron a Rusia para aislarla y destruir su poderío militar. Se oponen a la autodefensa y a la lucha por la autodeterminación de Ucrania, equiparada a una guerra occidental para subordinar Rusia a Occidente.

Por lo tanto, es difícil saber qué piensan estos grupos de la negativa estadounidense y alemana de dar tanques avanzados a Ucrania. Si esta fuera una guerra querida y planeada por las potencias de la OTAN para acabar con Rusia, todo apunta a que Occidente proporcionaría todo el armamento que Ucrania necesitaba para cumplir esa tarea.

Y, sin embargo, Estados Unidos y los estados europeos no han actuado de esa manera. Han donado suficiente armamento para evitar que Ucrania pierda, pero no lo suficiente como para permitir que Ucrania expulse a Rusia.

Occidente se ha negado a donar aviones de ataque, artillería de largo alcance, tanques y sistemas de misiles avanzados que puedan usarse para operaciones militares ofensivas. Las negociaciones de la semana pasada entre estados pro-Ucrania en una base militar estadounidense en Alemania son un ejemplo de que esta política permanece.

Ucrania exige tanques de batalla modernos que, según dice y plausiblemente, necesita para desbordar las posiciones rusas. En particular, Ucrania quiere que Alemania done tanques Leopard 2 y permita que estas armas de fabricación alemana sean donadas a Ucrania por otros estados europeos que las usan. Los ejércitos europeos tienen alrededor de 2000 Leopard 2 en total. Ucrania dice que necesita 300; algunos expertos militares occidentales dicen que 100 cambiarían la balanza en contra de Rusia, que está utilizando contra Ucrania cada vez más tanques T-90, más modernos.

El viernes 20 de enero, los aliados de Ucrania acordaron proporcionar miles de millones de dólares en suministros militares, incluidos vehículos blindados. Pero no Leopard (aunque Gran Bretaña está enviando 14 tanques de combate Challenger 2).

El gobierno alemán dice que solo permitirá que los Leopards vayan a Ucrania si los estadounidenses envían sus tanques Abrams. Estados Unidos dice que los Abrams no son adecuados para su uso en Ucrania.

¿Por qué Occidente está tergiversando este asunto? Estados Unidos y Alemania están alarmados por las posibles consecuencias de la derrota de Putin en Ucrania, por lo que niegan a Ucrania equipamiento militar ofensivo. El estado alemán tiene miedo de la reacción rusa al suministro de armas militares ofensivas a Ucrania; tienen miedo de que la guerra se extienda y se salga de control.

Eso no es un estúpido cálculo alemán y estadounidense. Es una posibilidad real. Estados Unidos está haciendo equilibrios entre no querer que Putin gane en Ucrania y no querer lidiar con las consecuencias de la derrota de una Rusia con armas nucleares.

Sin embargo, Ucrania está siendo destruida, poco a poco, como observamos. Rusia está planeando una nueva ofensiva en primavera y parece estar concentrando tropas en el oblast de Zaporiyia. El 17 de enero el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, anunció la intención de Rusia de aumentar sus fuerzas armadas hasta 1,5 millones de miembros. Putin parece decidido a continuar la guerra en Ucrania. Si Putin y el estado ruso ganan en Ucrania, ese no será el final del imperialismo agresivo nacionalista impulsado por Putin.

Workers' Liberty cree que Ucrania debe recibir las armas que necesita para luchar y poder derrotar el intento ruso de subyugarla. Occidente no debe ceder al chantaje de Putin. La victoria de Ucrania es el único camino hacia una paz estable y democrática.

Estados Unidos estima que Rusia ha sufrido 188.000 bajas en Ucrania, incluidos 47.000 muertos.Es un asombroso número de muertos en un año de guerra. En comparación, Rusia sufrió 15.000 muertos en ocho años de guerra en Afganistán. No debemos asumir que la terrible guerra de Rusia en Ucrania no tendrá consecuencias políticas para Putin dentro de Rusia, incluso en su estado ruso cada vez más intolerante y represivo.

Solidaridad internacional significa:

¡Ayuda a Ucrania a luchar y defender su autodeterminación!

¡Solidaridad con la izquierda ucraniana y el movimiento obrero!

¡Solidaridad con la izquierda rusa y con quienes allí protestan contra la guerra.

25 enero 2023